La emoción me invade.
Reconozco que después de un año, pocos productos de belleza me emocionan tantísimo como lo ha hecho este.
Después de leerlo en alguna revista hace meses, la curiosidad de probar las extensiones de pelo de quita y pon era cada vez mayor.
Creo que todas hemos soñado alguna vez con ponernos extensiones.
Las más valientes se han atrevido y las menos lanzadas nos moríamos de envidia pero no nos atrevíamos a dar el paso, la mayoría de las veces por desconocimiento tal vez.
Así que cuando ví las extensiones Magic Hair de la marca de cosmética más difícil de pronunciar y escribir del mundo, Schwarzkopf, soñaba con que fuera lo que yo estaba buscando.
Y hoy por fín, me han llegado.
Mi primer pensamiento (imaginaros…) ha sido para el peluquero que decidió por cuenta propia que yo sea rubia desde el viernes pasado, y el tono de las extensiones lo elegí semanas atrás… así que abrí con miedo el paquete e inesperadamente me llevé la primera alegría: el tono encajaba perfectamente con mis mechas.
Es un pelín más oscuro pero queda natural…
Cada vez más emocionada, no podía esperar a probarlas.
Las saqué rápidamente de la caja y después de dudar unos segundos sobre el funcionamiento de las pincitas que llevan, me coloqué una en plan rápido y quedaba genial.
En cada caja de Magic Hair vienen tres unidades para que las coloques a tu gusto, dependiendo del volumen o el estilo que quieras.
Cómo se utilizan:
1.- Abre todos los clips.
2.- Separa el cabello de forma horizontal con la ayuda de un peine (el pack incluye una pinza para ayudarte).
3.- si quieres varias capas, empieza por la parte inferior del cabello
4.- Cubre las extensiones con el cabello que tenías recogido
Truco: Empieza siempre por el clip del medio y cuando esté colocado perfectamente, cierra los clips de los extremos.
Consejos de lavado de las extensiones:
Para lavarlas, quítatelas (no laves el pelo con ellas puestas) y déjalas a remojo con agua templada y un champú suave.
Acláralas de la raíz a las puntas.
Sécalas con una toalla (no utilices secadores, ni planchas).
Peínalas cuando estén totalmente secas y a ser posible con un cepillo de púas naturales.
Así que os las recomiendo 100%.
El precio son 29 euros, así que si las utilizo todo lo que yo creo, os aseguro que no es caro.
La facilidad de utilización es total. Tanto que mis instrucciones estaban en alemán y con la simple ayuda de un dibujo me las he puesto sin problema alguno.
También he encontrado por la red alguna idea de peinado, pero a eso aún no me atrevo:
Emocionada… Emocionadísima estoy.
Se nota ¿verdad?
PD.- Y sí, lo confieso, cada vez que tengo que escribir Schwarzkopf, lo busco en Google… nadie es perfecto!!
