En esto de los cepillos de pelo, las cosas han evolucionado mucho en los últimos tiempos.
Aunque confieso que soy bastante tradicional y no hay uno mejor que los míticos Mason Pearson, llamados los «Rolls Royce de los cepillos», admito que ni la economía, ni los niños ni el modo de vida que llevamos se adapta fácilmente a ese tipo de cepillo.
Hoy necesitamos cepillos para peinarnos en el coche, llevar en el bolso, en la bolsa del gimnasio o que resistan los tirones cuando cepillas el pelo a tu hija.
Así que este tipo de cepillos más innovadores que además, consiguen reducir el encrespamiento y nos dan cierta comodidad por su forma ergonómica y facilidad de llevarlo, son una buenísima opción también a tener en cuenta.
Hoy os quiero contar el último que he probado, llamado ikoo y que aporta dos cosas que me han encantado:
La primera es que, según explica la marca, la disposición de sus púas, en forma de tablero de ajedrez, evita la rotura del cabello y lo mima durante el cepillado.
La segunda es que este diseño se realizó con ayuda de expertos en Medicina Tradicional China para que ejerza un masaje en el cuero cabelludo y teniendo en cuenta importantes puntos de acupuntura.
Yo no entiendo demasiado nada de Mediciona Tradicional China y menos de acupuntura, pero sí os puedo decir que es un auténtico placer cepillarse el pelo porque da bastante masaje (creo que también porque las púas son más largas y finas que en otros). Y el pelo lo deja muy bien.
Viene en una caja como si fuera un auténtico objeto de lujo, está disponible en 5 colores y tiene un precio (un pelín alto) de 21,95 euros.
